os salesianos llegaron a Salta el 9 de marzo de 1911. Al día siguiente, comenzaron el Oratorio en calle Pellegrini 76. Allí inauguraron la pequeña capilla que vemos abajo.

Pocos días estuvo en ese local, ya que era bastante reducido y no muy  adecuado para los planes de expansión. Por eso se trasladaron a calle Florida 186, a la casa paterna de Monseñor Linares, quien la donó generosamente a los salesianos.

Ya desde entonces, el mismo Obispo y el Padre Director, Luis Correa Llano, habían iniciado las gestiones ante Don Ángel Zerda para que este colaborara con el nuevo Colegio, quien no contento con haber donado el terreno de Caseros 1250, también proporcionó los fondos para la construcción del edificio inicial.

Los planos originales preveían que la Capilla estuviera ubicada en la esquina de Caseros y Bolívar, y que tuviera una gran torre central. La muerte de Ángel Zerda, ocurrida el 1 de mayo de 1913, dificultó continuar con las obras exactamente previstas. El diario "La Provincia", en su edición del 3 de mayo de 1913, ofrece una muestra de cómo se hubiera visto el Colegio.

Apenas instalados los salesianos en Caseros 1250, la Capilla se ubicó sobre calle Caseros, pero más próxima a la esquina con Alvear, donde actualmente se encuentran distintas oficinas y la Biblioteca, como vemos en la foto de arriba, la cual fue iniciada en 1928.

Gran parte de los elementos de carpintería que la nueva Capilla requería fueron realizados por maestros y estudiantes en los Talleres de Artes y Oficios que el Colegio tenía por entonces,  ubicados en el pabellón que delimita el edificio por calle Alvear, actualmente sala de mantenimiento, oficinas, depósito y Sala de Juegos.

En las fotos siguientes vemos dos im ágenes del Taller de Carpintería y un banco de la Capilla recién terminado.

El 4 de noviembre de 1928 se bendice la nueva Capilla. Al día siguiente se celebra la primera misa. El costo de la capilla fue de $ 120.000 de entonces, financiados con fondos del presupuesto nacional, gracias a las gestiones del diputado Manuel Alvarado. Primero se construyó el interior y luego el frente, que una vez terminado lucía como vemos abajo. El 8 de diciembre de 1957 Monseñor Tavella bendijo la mayólica de María Auxiliadora que se encuentra ubicada a la entrada.

Así es como se ve el interior de la Capilla en la actualidad. Las obras de carpintería del altar mayor y los paneles que separan la sacristía, concluidos e instalados en abril de 1954, fueron dos de los trabajos destacados de los artesanos del Colegio. El altar que ocupa Don Bosco era el antiguo altar de la Capilla de calle Pellegrini.

Y este es el frente actual de la Capilla, luego de las obras de restauración del 2010. Los colores son muy semejantes a los que presentaba originalmente. El enrejado se levantó en la década del '90, por cuestiones de seguridad.

Cuentan que cuando Don Rua, como Rector Mayor, visitaba un Colegio, lo primero que hacía era pedir que lo llevaran a saludar "al Dueño de casa". Todos sabían, entonces, que quería visitar la capilla. Que el Dueño de nuestra Casa, que tan bien honrado ha sido en las construcciones y edificios, encuentre siempre el mejor templo en nuestro corazón.